Ir al contenido principal

Cerveza y confesiones (I)

-Querida, ¿Cuál es tu problema?
-Ninguno ¿por qué?
-Estás fumando más que una puta presa, con el perdón de las putas. Bebes como si fueras Amy Whitehouse días antes de morir y te hablo, te hablo y te hablo y como siempre me ignoras pero al menos antes disimulabas.
-Disculpa amigo, ¿qué me decías?
-Te hablaba de mi marido.
-¡Claro! De Héctor.
-Mawa, Héctor y yo terminamos hace N-U-E-V-E semanas.
-¡Verdad! Hablas de este chico, el albañil, este que, me perdonas mi amor pero tiene una pinta de malandro. ¡El maricolandro! Jajajaja.
-Ese es José y fue mi eterno amor de una noche. No me lo recuerdes que todavía me duele.
-¿Y la puta soy yo? ¡Qué fuerte!
-Anyway, ¡Not problem! I don´t want to talk to you. ¡Stop!
-Tu inglés me cautiva Shakira.
-¡Cuan cruel eres conmigo! ¿Qué te he hecho yo para merecer esto?
-No te pongas Corín Tellado que sabes muy bien que por mucho que nuestros comentarios sean homofóbicos, insensibles y crueles son parte de nuestro arte para burlarnos de nosotros mismos, y crear una coraza para que nadie más nos haga daño. Yo no soy así con nadie más excepto contigo, aunque debería serlo porque mientras más edad tengo más tonta, estúpida y llorona me pongo. Y disculpa que llore, estoy sensible...
-Darling, querida. No te pongas así...Ya llamo al mesonero para que quite los cuchillos porque estás a punto de cortarte las venas.
-¡Si eres tonto!
-¿Cómo se llama?
-¿Quién?
-¿Cómo que quién? Los últimos días lloras por dos cosas, cuando cobras la quincena o por alguna mujer. Como ya pasó el día de pago imagino que es la última razón.
-No me llamó el día de mi cumpleaños.
-¿Quién?
-Tú sabes quién.
-¡Madonna y Lady Gaga Santísima! Mi vida no estás ya en el 2012, esa relación pasó, esa mujer está con otra persona. Seguramente el día de tu cumpleaños estaba tirando con la otra y no se acordó y después no le importó llamarte, olvídate de ella que ella ya lo hizo. ¿Hasta cuando vas a seguir pensando que existe un futuro entre ustedes? ¿O que le importas?
-¡Te pasaste!
-....
-...
-Tienes razón Mawa. Lo siento. A pesar de lo pesado que puedo ser no me gusta verte llorar, o que te hagan daño, o que tú misma te hagas daño.
-¡Estos putos recuerdos!
-Bye, bye memories...
-Amigo, de verdad. Te voy a pagar unos cursitos online en inglés, no lo sigas intentando.
-¡Al menos te hice reír!
-¡Gafo!
-Para alegrarte más el momento te voy a comentar algo pero acércate para que nadie más escuche. Al lado de nosotras está una chica que no te quita la vista de encima. Te está devorando con la mirada, tiene cara de querer comerte completa con todo y ropa.
-¿Quién?
-La de franela roja.
-¿Eso no es un hombre?
-No niña...creo. ¡No! Es una mujer, fíjate que apenas se le notan los senos.
-Hay hombres que tienen senos.
-¡Es una mujer Mawa! Y te desea.
-Parece un hombre...
-¿Qué tienes contra los hombres darling?
-No tengo nada contra los hombres. Pero si una mujer se parece a un hombre o actúa como uno, ¡No me gustan! Porque soy lesbiana y me gustan las mujeres, no las mujeres que se parecen y actúan como un tipo. ¡Para eso estoy con un tipo!
-¡Qué homofóbica eres!
-¿A ti te gustan los hombres afeminados? ¿Esos que se sacan las cejas? ¿Los que actúan como una mujer? ¿Estarías con uno así?
-¡Dios me ampare! Sería como estar con mi hermana.
-¿Te das cuenta?
-Pero en las mujeres es diferente.
-No, no es diferente.
-¿No le darías ni una oportunidad?
-¡No! Me gustan las mujeres, no las camiones 350.
-Pero tú femenina, femenina, no eres. ¡No me escupas en la cara!
-Quizás no me ponga uñas acrílicas o tenga maquillaje hasta para dormir pero tampoco uso gorra, pantalones de hombres, botas puro coleo y no me agarro entre las piernas como si tuviera algo allí.
-Y yo que quería llevarte mañana a una disco gay pero van puras mujeres así...
-Gracias, pero no. Además mañana tengo una cita.
-¡MÁ-TA-ME! ¿Con quién?
-Un ex novio que me consiguió por Facebook y quedé con él para tomar algo.
-¿Un hombre? ¿Ex novio?
-Sí.
-No lo puedo creer. No te imagino con un hombre.
-Yo tampoco, pero fue hace como 20 años y le dije que iba a verlo.
-Ese te quiere coger.
-¡Ay por favor!
-¿Cómo vas a hacer?
-Solo vamos a hablar.
-¿Sabe que eres?
-No.
-¿Le vas a decir?
-Si me pregunta.
-Ese te quiere coger.
-Lo paro en seco y si me pregunta le digo, aunque me fastidiaría el típico interrogatorio.
-Déjame adivinar...
-¿En qué momento te diste cuenta que te gustaban las mujeres? ¡Pero si no pareces! ¿Eres el hombre o la mujer en la relación?. Pero si nunca has estado con un tipo ¿cómo sabes que no te gusta? ¿Qué hacen dos mujeres juntas? Y bla, bla, bla...
-Menos mal que estás preparada...
-¿Algún consejo amigo para mi cita de mañana?
-Lleva condones.
-Te estoy pidiendo un consejo en serio.
-Y lubricante.
-¡Todo es una broma para ti!
-Te va a doler.
-¡Idiota! Solo es un ex novio que quiere tomar un café.
-Los hombres solo quieren sexo. Te lo digo por experiencia.
-¡Solo quiere un café!
-Mawa, la tipa de rojo se acerca a la mesa.
-¡Chamo! La cuenta por favor...












Comentarios

Entradas populares de este blog

Anatomía de un guayabo (y II)

-No quiero que me malinterpretes. Te pregunté en esa oportunidad si a pesar de conocer todos los ciclos por los que tienes que pasar, desde el momento en que sabes que te enamoraste, hasta el día en que te das cuenta que todo termina, y entras en ese maluco guayabo querías, aún así, a pesar de todo el lío...¿enamorarte? Lo digo porque sin duda, no puedo negarlo, ¡Vale la pena! Sí, sí, no creas que estoy loca. Chama, lo mejor del final, no es que quiera insistir en este sentimiento pesimista, pero lo mejor del final es terminar bien con tu ex. No, creas, pasa mucho y no es malo. O en un caso hipotético al menos no quedar con un sentimiento de odio porque si se da ese caso, quedar herida de rencores, tú serías la perdedora ¿Y no queremos perder verdad? En mi caso, mi última ex me montó tantos los cuernos, que ese debe ser el motivo por el que ahora se me cae más el cabello...¡No te rías! ¡Es verdad! Aquello fue una carnicería del engaño, lo mínimo que ella se merecía de mi parte era que

El fin del caos (y III)

 -No creo que te sirva este pantalón. Me dijo David sosteniendo en la mano un jean de su hermana, dos tallas menor a la mía. -¿No habrá algo más? Tardó un rato más en buscar y esta vez llegó con una larga falda amarilla llena de pliegos, lazos y lentejuelas de colores, una prenda que jamás en mi vida sobria y sensata hubiera utilizado.  No hace falta acotar que este no era el momento más sensato de mi vida. Una vez más. -Pero me la tienes que regresar rápido, es la falda favorita de mi mamá. La tierna advertencia de David junto a su disposición de ayuda, me hizo callar cualquier queja inútil en una situación donde no tenía muchas salidas. Tampoco quería seguir hablando de la noche anterior, pero David me empujaba. -¿Qué le pasó a tu pantalón? ¿Le hiciste el sexo oral a esta chama? Sin él saberlo, las dos respuestas a sus preguntas tenían una relación directa.  Le conté como en sueños me dejé llevar hasta el sofá.  Observé como mi amiga abría las piernas ante mí con sus manos guiando mi

El momento de la despedida o hasta aquí llega esta echadera de cuentos

Yo pensé que esto iba a ser muy fácil. Acaricié muchas veces la idea de llegar a este momento porque estaba loca por cerrar este ciclo que comenzó hace mucho tiempo. Prometí despedirme en la entrada 200 pero los tiempos se fueron alargando y me tocó, como muchos otros, salir de mi país. Al llegar a Lima dejé de lado el blog porque no tenía la paciencia, las ganas y la fuerza de voluntad para seguir empujando las historias. Emigrar me sumió en una especie de depresión pasiva (si esto de verdad existe) y me quitó por mucho tiempo las ganas de escribir, pero esos cuentos son para otro momento. Comencé a escribir por acá, si no me equivoco, en el año 2013.   Lo abrí tiempo después de llegar a Puerto Ordaz luego de vivir 13 años en Maracay, donde me fui a estudiar comunicación social. Llegué a Puerto Ordaz con el corazón roto porque había dejado al amor de mi vida en esa ciudad, con la promesa de regresar juntas muy pronto. Nunca ocurrió. El blog nació como una forma de sacar toda esta frus